Fortalecemos la movilidad inteligente y sostenible...
Debido al dramático incremento del uso de la bicicleta durante las cuarentenas (), y a las experiencias locales e internacionales que estamos presenciando, los empleadores y organizaciones deben estar preparados para el nuevo rol principal que la bici tendrá en el ecosistema de la movilidad urbana. El “boom” de la bicicleta es una realidad, está en aceleración y los datos lo demuestran.
La seguridad vial () da cada vez más de que hablar. Su relevancia es más latente con los acontecimientos grabados (y socializados en redes) en las últimas dos semanas de ciclistas en las vías (Chía, Zipaquirá, Bogotá, Medellín, Barbosa) se dio un impulso mediático muy importante. Esto es un fenómeno que pocas veces queda en cámara, pero no duden, que lamentablemente estas son escenas diarias. La violencia vial es una maldición urbana de la que no nos hemos podido librar.
El uso de la bicicleta como medio de transporte para ir al trabajo nos aporta muchísimas ventajas individual y socialmente. En la salud, promueve el distanciamiento social; evitamos menos contagio y fortalecemos el sistema inmunológico. En lo ecológico, priorizamos el papel fundamental que juega este tipo de vehículo para el ambiente: ‘NO CONTAMINA’. En lo económico, nos permite ‘AHORRAR’ algo de dinero.
Decirte que con poco esfuerzo e inversión podrás obtener estos y más beneficios te parece descabellado para sumarte a pensar que ‘ir al trabajo en Bici es la mejor alternativa que existe’.